Lo usamos, lo guardamos, lo pedimos, pero pocos saben cómo definir al dinero. Es una idea abstracta y lo visualizamos como billetes y monedas, aunque es más que eso. Saber qué es y cómo funciona es importante para llegarlo a administrar correctamente. Conocer cómo evolucionó, qué funciones y características cumple, nos dará una idea de su aspecto en el futuro.

El dinero es una herramienta que utilizamos a lo largo de nuestra vida. Lo recibimos como pago por nuestro trabajo, lo ahorramos para enfrentar una emergencia o realizar alguna compra a futuro. Con el dinero lo mismo podemos pagar el camión, comprar un café o pagar la cuenta de un restaurante. El dinero ha evolucionado en el tiempo y hoy en día es casi “invisible” y viaja a través de medios electrónicos.

Para garantizar su buen funcionamiento, el dinero debe operar como medio de intercambio, unidad de cuenta y depósito de valor. Asimismo, el dinero cumple con diez características básicas: aceptabilidad, estabilidad, durabilidad, portabilidad, divisibilidad, controlabilidad, autenticidad, homogeneidad, liquidez y fungibilidad. Su precio es la tasa de interés.